Ginebra.- Durante 2024, al menos 1.233 personas perdieron la vida en las rutas migratorias de América, lo que representa una disminución del 12 % en comparación con el año anterior, según informaron este viernes las estadísticas de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU.
Este descenso marca el segundo año consecutivo de reducción, después de que se alcanzara un récord de 1.529 muertes en 2022. Sin embargo, 2024 sigue siendo el cuarto año más mortal en las rutas migratorias del continente desde que la OIM comenzó a monitorear estas tragedias a través de su Proyecto Migrantes Desaparecidos en 2014.
En lo que va de 2025, el proyecto ya ha registrado al menos 93 muertes de migrantes en América.
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De los fallecidos en 2024 en América, 523 perdieron la vida en la frontera entre EE.UU. y México, 187 en el trayecto desde el Caribe hacia las costas de EE.UU., y 174 en el peligroso tapón del Darién, la ruta selvática que conecta Colombia y Panamá.
Además, 95 migrantes fallecieron mientras intentaban llegar desde República Dominicana a Puerto Rico, según las cifras proporcionadas por la OIM.
La OIM destacó que sus estadísticas para América son provisionales, y señaló que nunca antes había registrado tantos muertos en el Caribe ni en el Darién.
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Desde que comenzó el monitoreo en 2014, se han documentado 11.038 muertes en las rutas migratorias americanas, una cifra solo superada por los 31.722 muertos o desaparecidos en el Mediterráneo y los 16.895 en África.
De esos más de 11,000 fallecimientos en América en la última década, 6.439 ocurrieron en la frontera entre México y EE.UU., 758 en el trayecto desde el Caribe hacia EE.UU., y 542 en el Darién.
