Santo Domingo, 28 de marzo – La reciente medida del Ministerio de Economía y Finanzas de Haití, que prohíbe a las oficinas de aduanas recibir mercancías extranjeras que transiten por República Dominicana, ha generado preocupación entre empresarios locales. La disposición, que entrará en vigor el 7 de abril, busca reorganizar el comercio en la frontera, pero ha sido calificada como improvisada por líderes empresariales dominicanos.
César Dargam, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), advirtió que esta decisión podría distorsionar el mercado y fomentar la informalidad. “Ambos países debemos trabajar para consolidar la formalidad de nuestro intercambio, y este tipo de distorsiones podrían empujar a la informalidad”, expresó.
Por su parte, Iván García, presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes (FDC), señaló que la medida no debería afectar al comercio siempre que no interfiera con los mercados binacionales. “Aunque la medida es a partir del 7 de abril, vamos a esperar a ver qué pasa mañana en los mercados binacionales de Pedernales, Jimaní, Elías Piña y Dajabón”, comentó.
García explicó que la prohibición responde a la negativa de barcos internacionales a atracar en puertos haitianos debido a problemas de seguridad, lo que ha llevado a los empresarios haitianos a utilizar los puertos dominicanos como alternativa. Sin embargo, aclaró que el sector importador dominicano no se verá afectado directamente.
La medida ha generado incertidumbre en un contexto de deterioro político e institucional en Haití, lo que subraya la necesidad de un monitoreo cercano por parte del gobierno dominicano y un diálogo continuo con las autoridades haitianas.
