La avenida George Washington se transformó en un escenario de color, música y tradición con el Desfile Nacional de Carnaval 2025, un evento que reunió comparsas de todo el país y que tuvo como provincia invitada a San Cristóbal.
Desde las 4:00 de la tarde, más de 160 comparsas de distintas localidades como Monte Plata, Dajabón, San Pedro de Macorís, Bonao, Constanza, San Francisco de Macorís y Puerto Plata, entre otras, desfilaron con espectaculares vestuarios y energéticas coreografías, ofreciendo un espectáculo lleno de creatividad y pasión.
A lo largo de la jornada, el público no solo disfrutó de las comparsas, sino también de una muestra auténtica de la identidad cultural dominicana, reflejada en cada disfraz, cada baile y cada representación artística. Familias enteras y grupos de amigos se ubicaron a lo largo del malecón con sillas plegables y banderas, listos para ser parte de una de las fiestas más esperadas del año.
El ministro de Cultura, Roberto Ángel Salcedo, resaltó la importancia del evento, destacando que el carnaval es una expresión esencial de la identidad nacional. También agradeció a los organismos de seguridad y socorro que hicieron posible que la celebración transcurriera con orden y sin incidentes.
«El carnaval es un reflejo de lo que somos, una celebración que une tradición, creatividad y orgullo por nuestra cultura», expresó el ministro.
Entre las comparsas más llamativas destacaron figuras icónicas como el expresidente Joaquín Balaguer, el polémico Donald Trump, así como una puesta en escena que abordó el tema del cuidado de los inmigrantes. También sorprendió la imponente representación de la cigua palmera, ave nacional de la República Dominicana, rodeada de una espectacular jungla tropical.
Los colores de la bandera dominicana se hicieron presentes en numerosas comparsas, reforzando el sentido de identidad y orgullo patrio. Ni siquiera la lluvia ligera, que cayó alrededor de las 7:00 de la noche, logró apagar el entusiasmo de los asistentes ni de los participantes, quienes continuaron con la misma energía hasta el final del evento.
Las comparsas realizaron impactantes presentaciones ante los jueces, quienes evaluaron aspectos como creatividad, originalidad y puesta en escena para premiar las mejores propuestas. El desfile culminó con una explosión de alegría y música, reafirmando que el carnaval sigue siendo una de las tradiciones más vibrantes y esperadas por los dominicanos.
Este año, el evento no solo celebró el folclore y la creatividad, sino que también dejó un mensaje de unidad y orgullo nacional, destacando la riqueza cultural del país y la pasión con la que el pueblo dominicano mantiene vivas sus tradiciones.
