Los seguros médicos, la realidad es que lo mejor es tenerlos y no necesitarlos nunca.
Llegué a SENASA llena de dudas y con temor por una enfermedad de alto costo, y lo cierto es que me marché con la tranquilidad de saber que contaba con un seguro que responde. La certeza de saber que el Estado invierte en mejorar los servicios públicos y que estar afiliada a SENASA vale cada peso que se paga.
Un director ejecutivo, Santiago Hazim, que prioriza la cobertura de sus afiliados y cuyo liderazgo permea a todo el personal, tratando a las personas de forma humana, con sensibilidad ante las situaciones de la gente, y atendiendo con profesionalidad. Pero, señores, tener un personal que escucha ante una emergencia de un paciente, eso no tiene precio.
Simplemente gracias al Seguro Nacional de Salud (SENASA)
Eternamente agradecida de todos los involucrados.