En una audiencia reciente en Nueva York, Ismael «El Mayo» Zambada, presunto líder del cártel de Sinaloa, se declaró no culpable de los cargos que enfrenta. Zambada, quien fue detenido en julio junto a un hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, se encuentra bajo custodia federal sin derecho a fianza desde entonces. El pasado 13 de septiembre, compareció ante el tribunal para responder a las acusaciones que incluyen tráfico de drogas, lavado de dinero y posesión de armas.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha presentado 17 cargos contra Zambada, destacando su papel como presunto organizador principal del cártel de Sinaloa. Las autoridades lo acusan de dirigir una red criminal que opera en diversas regiones de México y Estados Unidos, incluyendo ciudades clave como Cancún, Monterrey y Nueva York.
Zambada, quien se cree que asumió el liderazgo del cártel tras la recaptura de «El Chapo» en 2016, ha sido señalado en múltiples ocasiones por su presunta implicación en delitos graves, como la conspiración para asesinar en el extranjero y el secuestro. El Departamento de Estado de EE.UU. lo clasifica como uno de los criminales más buscados, destacando su capacidad para transportar grandes cantidades de narcóticos y su conexión con diversas organizaciones criminales.
Antes de su arresto, la DEA había ofrecido una recompensa de 15 millones de dólares por información sobre su ubicación. Las autoridades estadounidenses han descrito a Zambada como el «principal administrador» de la empresa criminal, implicado en el tráfico de metanfetaminas, heroína y marihuana. La próxima fase de su proceso legal determinará si enfrenta un juicio completo por los graves cargos que se le imputan.
