El huracán Melissa, ahora convertido en el fenómeno más intenso de la temporada atlántica, impactó con fuerza devastadora en Jamaica durante la madrugada del lunes, alcanzando la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson. Con vientos sostenidos superiores a los 280 km/h, el ciclón provocó inundaciones catastróficas, cortes masivos de electricidad y daños severos en infraestructuras clave.
Más de medio millón de personas en Jamaica permanecen sin servicio eléctrico, mientras el gobierno ha ordenado evacuaciones en zonas vulnerables, cerrado aeropuertos internacionales y declarado estado de amenaza nacional.
Tras su paso por Haití, donde más de 2,000 personas fueron desplazadas y acogidas en refugios temporales, Melissa se dirige al sureste de Cuba, donde ya se registran lluvias intensas y vientos con fuerza de tormenta tropical. Se espera que toque tierra en la madrugada del miércoles como huracán de categoría 4.
En República Dominicana, el fenómeno ha generado lluvias torrenciales y ráfagas de viento en múltiples provincias del suroeste y la cordillera Central. Al menos 63 escuelas han reportado daños estructurales, mientras las autoridades mantienen alertas meteorológicas activas y exhortan a la población a seguir las medidas preventivas.
