Las decisiones del INTRANT

Por: Pedro René Almonte M.
El tiempo y los resultados hasta ahora me van dando la razón, y no es que yo sea un genio, un sabio ni nada parecido; es que en base las experiencias pasadas y al uso de la ciencia, uno puede casi predecir lo que va a ocurrir. He repetido hasta la saciedad que los servicios esenciales, esto quiere decir lo que demanda un ciudadano de cualquier país del mundo, y que debe suplirlo el Estado como garante del bienestar colectivo, bajo ningún concepto se deja en manos del capital privado, porque el capital privado primero saca rentabilidad y beneficios y luego da el servicio (exagero un poco pero por ahí va). Una cosa es que el sector privado tenga participación en dichos servicios esenciales y otra cosa muy diferente es que tenga el control y la capacidad de dejar al Estado sin margen de maniobra ante las demandas sociales.
En tal sentido, cuando un ciudadano ve que en su casa no hay agua, no hay saneamiento, no se recogen los residuos sólidos, no hay servicio de energía eléctrica, no hay seguridad y pudiera seguir mencionado muchos servicios básicos más, pues a quien culpa dicho ciudadano es al Estado, no a un empresario privado; y el costo social lo pagan las autoridades que fueron electas por el voto de la gente.
Asimismo , pienso que es un error entregar la distribución de la energía eléctrica al capital privado ; igualmente pienso que poner en manos de una empresa privada el control del sistema semafórico fue un grave error que hace unos días pagamos todos los ciudadanos del Distrito Nacional . Nunca el Estado debe quitarse la ropa para vestir a un particular.
De modo que, las decisiones del INTRANT van por el camino correcto. Lo ideal hubiese sido que ese contrato con TRANSCORE LATAM, nunca hubiera existido, pero nunca es tarde si la dicha es buena. Las decisiones de rescindir el contrato con TRANSCORE LATAM, mantener y fortalecer el control del sistema semafórico bajo la administración directa del Estado a través del INTRANT y solicitar una investigación al ministerio público, son correctas.
Milton Morrison tiene en sus manos un gran reto, que comprende desde corregir los entuertos del pasado a diseñar hoy el sistema de movilidad y transporte del futuro, y que en unos años hablemos de los fastidiosos tapones como un mal recuerdo .