contra el comunicador y detective Ángel Martínez, acusándolo de difamación e injuria2. Riverón sostiene que Martínez lanzó señalamientos falsos en su programa de YouTube, vinculándolo con narcotraficantes y fortunas ilícitas. La denuncia fue depositada ante la Fiscalía del Distrito Nacional, respaldada por una memoria USB con el contenido ofensivo.
Riverón exige una indemnización de diez millones de pesos por los daños morales y profesionales sufridos. Además, Martínez enfrenta medidas de coerción, incluyendo impedimento de salida del país y presentación periódica ante las autoridades. También ha sido acusado de difamar a otras figuras públicas, como el diputado Sergio Moya y el director del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones, Guido Gómez Mazara.
Este caso ha generado reacciones en círculos periodísticos y jurídicos, marcando un nuevo capítulo de tensión entre comunicadores en la República Dominicana