
Tallahassee, Florida. – La comunidad universitaria y la sociedad en general se encuentran consternadas tras el trágico tiroteo registrado este jueves 17 de abril en el campus de la Universidad Estatal de Florida (FSU), ubicada en la capital del estado. El lamentable suceso dejó al menos un fallecido y seis personas heridas, una de ellas en estado crítico, según reportes confirmados por medios locales y las autoridades.
El tiroteo ocurrió alrededor del mediodía en las cercanías del Student Union Building, una zona muy transitada del campus. La escena fue descrita por testigos como caótica, con estudiantes huyendo en busca de refugio y las alarmas del sistema de seguridad activándose de inmediato. La universidad emitió una alerta de “tirador activo”, instruyendo tanto a los estudiantes como al personal docente y administrativo a refugiarse en lugares seguros.
La portavoz del hospital Tallahassee Memorial HealthCare, Stephanie Derzypolski, confirmó que el centro recibió seis pacientes relacionados con el incidente: uno en estado crítico y los demás en condición grave. Las autoridades aún no han revelado la identidad del atacante, pero confirmaron que un sospechoso fue detenido aproximadamente dos horas después del tiroteo. Según testigos, el atacante habría disparado al menos 15 veces en cuestión de segundos, lo que provocó pánico generalizado.
El equipo de emergencia y los cuerpos de seguridad acudieron rápidamente al lugar, logrando controlar la situación y evacuar a quienes se encontraban en la zona afectada. Como medida de precaución, la universidad suspendió todas sus actividades académicas, culturales y deportivas, incluyendo el partido de béisbol programado contra la Universidad de Virginia.
Las reacciones de figuras públicas no se hicieron esperar. El presidente Donald Trump calificó el hecho como “horrible” y ofreció sus condolencias a las familias afectadas. Por su parte, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, y la fiscal general del estado, Pam Bondi, también expresaron su solidaridad y subrayaron la importancia de reforzar la seguridad en los campus universitarios.
Este tiroteo reaviva el debate nacional sobre la violencia armada y la seguridad en los centros educativos, siendo el tercer incidente de este tipo en una década en FSU. La comunidad académica exige respuestas, acciones concretas y medidas que prevengan futuras tragedias.
La investigación continúa en curso y se espera que en las próximas horas las autoridades ofrezcan más detalles sobre el atacante, sus motivaciones y las condiciones de los heridos. Mientras tanto, el país entero observa con tristeza una nueva página oscura marcada por la violencia en una institución de enseñanza superior.